Suspensión

Cualquier vehículo dispone de sistema de suspensión o de amortiguación. Como en otros casos, se trata de elementos que cumplen una función de garantía de seguridad del coche.

La suspensión se encarga de que haya una mayor (y mejor) adherencia en las ruedas con la carretera, ofreciendo así mayor seguridad y confort al conducir.

A diferencia de los neumáticos, que están a la vista, la suspensión no puede verse y eso hace que sea más complicado detectar cualquier anomalía o desgaste, por eso es importante realizar revisiones periódicas con tu taller de confianza.

Servició de suspensión
Servició de suspensión

Por las carreteras españolas circulan 6,2 millones de vehículos con los amortiguadores en mal estado.

Los amortiguadores forman parte del sistema de suspensión, que son los componentes que mantienen el contacto de la rueda y la carretera.

Teniendo en cuenta que los amortiguadores contribuyen a la seguridad de la conducción, como por ejemplo en la acción de frenado, no conviene arriesgarse a un mal funcionamiento del sistema de suspensión del vehículo.